jueves, 24 de diciembre de 2009

Ahora me faltan las palabras ... y me sobran los gestos.

Cuando los recuerdos pasan a buscarte
y no hay lugar a donde ir ...
Cuando no sabes qué decir,

después de tanto tiempo:
"hola, qué ha sido de tu vida.

Cómo fue que reaparecí en tus pensamientos".

Qué hacer cuando vienen a visitarte,

sin aviso anticipado ...
Parece que les gusta lastimarte

a esos fantasmas del pasado,
que te atormentan y dejan muy mal herido ...
completamente perdido.

¿Ha de ir y venir el tiempo siempre

como un efecto de la memoria?
Y en ese vaiven no piden permiso

los fantasmas del pasado.
Nunca callan y nos dejan sin palabras.

Puede postrarse uno frente a un espejo
y ver como se tuerce la espalda

con ese peso en los hombros ...

Piensa y piensa en cómo volcarse sobre el
y cambiar los roles del destino.
Y fija la mirada en el espejo
... se ven los ojos negros del olvido.

(C.Orozco y J.Madrid)

1 comentario:

Erika dijo...

Jorgee no sabes, este artículo me acaba de calar hondo como dice Bunbury, es hermoso y tan cierto, los fantasmas del pasado que te lastiman, me hicieron acordar a una canción de Violeta Parra en la cual le escribe a su corazón que la atormenta:
¿Cuál es mi pecado pa maltratarme, sí, pa maltratarme? como el prisionero, por los gendarmes, sí, por los gendarmes, quieres matarme.